Los Enterradores – Capítulo I

Introducción

Estamos en el año 13.689.039.483 del último Imperio Solar, apenas sería el ciclo 832.541 según el calendario de la Colectividad Neocrón, también llamados «los Enterradores» en este Universo. Y es que los Enterradores son del Universo anterior a éste, ellos dejaron el Último Mensaje, el Único Mensaje. No hay restos que los arqueólogos puedan estudiar, no hay traza material de su paso por la existencia. Sin embargo, pudieron dejar un mensaje, escrito en lo más profundo del firmamento, y hemos sido capaces de leerlo.

Esta pudo haber sido su historia.

Capítulo I
El profeta

Como un fuego fatuo, Sairog circunvaló el planeta casi instantáneamente, hasta llegar a la montaña. Allí, miró hacia la cumbre y penetró en la ladera. Poco después llegó a la estancia donde estaban Odara y Rinat.

La Colectividad Neocrón, antaño compuesta por trillones de entes en todo el Universo, quedaba ahora reducida a tres seres, los Tres Últimos, aunque hay que tener en cuenta que sólo quedaban cuatro seres vivos en el Cosmos. Entre ellos se conocían por los nombres que ellos mismos habían escogido: Sairog, Odara y Rinat. Eran lo más parecido a lo que podríamos conocer como dioses. De hecho, ellos habían construido el planeta en el que comienza este relato.

Estos entes, aun por su propio deseo con una forma todavía humanoide, no se comunicaban ya con sonidos, pues podían fundir sus mentes. Sin embargo aquí vamos a ofrecer el supuesto diálogo que mantuvieron en aquella ocasión.

-¿Has preparado la estrella?-, preguntó Sairog.

-Aún queda, pero estará a tiempo-, respondió Odara.

Rinat miró con sorpresa a Sairog: -¿Has visto el cúmulo que se está formando en el centro de esta galaxia?-, le dijo

-Sí, es curioso, debe ser de los últimos.

-Sí, eso pensamos nosotros también.

Rinat cruzó un pensamiento inquieto con Odara, y siguieron calculando.

Sairog se volvió hacia la estrella. Notaba el flujo de neutrinos a través de su cuerpo.

-Esta estrella dejará una bonita onda cuando muera.

Por supuesto, mandar un mensaje ordinario de un Universo al siguiente es imposible, todo queda borrado por el nuevo Big Bang. Sin embargo hay un fondo de radiación en todo el Universo, y no es isótropo, tiene pequeñas irregularidades, que son consecuencia de la evaporación de los últimos agujeros negros. Si se controla cuándo, dónde y qué estrellas van a ser las últimas en morir, es posible influir en el fondo de radiación del próximo Universo.

Odara se desconectó de la estrella, necesitaba comprobar algo lejos de allí. Salió de la estancia y atravesó la galaxia a la velocidad de la luz. Por supuesto esto le llevó bastante tiempo. Todo estaba previsto.

Observó el núcleo galáctico y el reciente cúmulo de agujeros negros que se había formado. Era más grande de lo habitual pero no tenía nada más de especial, no intervendrían en el Plan. Por fin alcanzó su objetivo, se detuvo frente a una gigante roja. Esta sí intervendrá en el Plan. Miró a su alrededor, encontró una joven estrella, entonces se conectó a ella, creó el campo necesario, la arrastró hacia la gigante roja, y dejó que poco a poco ésta engullera a su joven presa. Entonces esperó hasta que la estrella recuperó la fusión del deuterio, y emprendió el viaje de vuelta.

Antaño, la Comunidad Neocrón no tuvo individuos tan poderosos. Todo empezó en un simple planeta y con simples seres vivos mortales. El Profeta descifró el Mensaje. Supo que en su anterior Universo, unos seres fabulosos habían intentado evitar la muerte de aquel Cosmos, evitar el Big Bang, que se repetía cíclicamente. Obviamente habían fracasado, sin embargo, en un último acto de altruismo, consiguieron trasladar parte de su conocimiento al siguiente Universo, por medio del Mensaje escrito en el fondo de radiación. El Profeta fundó la Comunidad Neocrón, formada por individuos que encomendaron su vida a evitar el fin del Universo. Eón tras eón, y a medida que el Mensaje se extendía y el fin del Cosmos se acercaba, la Comunidad Neocrón acabó siendo, por acumulación de todos los seres vivos existentes, la única especie del Universo. Pronto dejaron de necesitar instrumentos para manipular la actividad estelar, podían controlarlas con sus propias manos y mente. Se convirtieron en los seres fabulosos de los que supo tanto tiempo atrás el Profeta.

Odara volvió a fijarse en el cúmulo y decidió acercarse a él para observarlo mejor. Entonces se paró en seco. Los agujeros negros habían formado una compleja estructura. Esto es del todo improbable, se empezó a temer lo peor. Entonces lo vio. Sairog estaba atrapado en dicha estructura. No podía salir de ella sin deshacerse en pedazos y para cuando pudiera recomponerse sería demasiado tarde para el Universo. Esto era sin duda obra de Ogoroth. Odara conectó con Sairog, tenía que estar seguro de que era él. Sairog percibió a Odara y, enseguida, sabiendo qué pretendía Odara, realizó una conexión mental total. Esta era la única forma de que ambos estuvieran seguros de la identidad del otro. Cuando fue así, ambos mandaron la señal de peligro a Rinat, Ogoroth estaba con ella haciéndose pasar por Sairog. Afortunadamente, la estructura de agujeros negros podía ser fácilmente desmantelada desde fuera. Odara acercó algunos de ellos entre sí, y dejó caer estrellas enteras en otros, de forma que pudo abrir un brecha para Sairog. Sin perder tiempo, emprendieron rápidamente el camino hacia el planeta donde Rinat ya los esperaba para combatir a Ogoroth.

El Mal existe. Al igual que el Bien. En el proceso de formación de la Comunidad Neocrón esto se hizo más patente que nunca. Fue un Neocrón el que concentró en si todo el Mal del Universo, y la lucha fue terrible, con billones de estos entes muertos a lo largo de todo el Cosmos. Sin embargo esa fue precisamente la causa de su derrota. El Bien, ahora disperso entre menos individuos, también consiguió hacerse fuerte en tres de ellos, al tiempo que todos los demás conferían todo su poder a estos últimos. Así, toda vida en el Cosmos quedó reducida a cuatro entes. El objetivo de los Tres Últimos era evitar el fin del Universo. El objetivo de Ogoroth era precipitarlo.

Cuando Sairog y Odara estuvieron lo suficientemente cerca, Ogoroth notó su presencia y supo que Sairog había sido liberado. No pudo reaccionar contra Rinat, éste ya había partido en busca de los otros dos.


¿Cómo seguirá esta historia? Ha llegado el momento de que el público decida entre estas opciones:

a) Rinat, Odara y Sairog consiguen escapar de Ogoroth para evitar una confrontación que ponga en peligro el Plan.

b) Rinat, Odara y Sairog se enfrentan a Ogoroth en una lucha que devasta la galaxia en la que se encuentran actualmente.

c) Ogoroth alcanza a Rinat y lo destruye. Odara y Sairog escapan.

Dejad un comentario con vuestra opción, podéis votar hasta el viernes, y el martes que viene saldrá la próxima entrega de esta interesante blogonovela.

Published in: on May 27, 2008 at 6:02 pm  Comments (17)  

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17 comentariosDeja un comentario

  1. Jejejeje, voy a inaugurar este nuevo frikiblog!! Me ha gustado mucho la historia y que conste que no es ni peloteo ni presión por parte del autor. Puedo prometer y prometo que si las entregas se producen regularmente voy a suplir el vacio que han dejado en mí las series a las que soy tan adicta como al chocolate con la trama de esta historia. Por cierto, voto por la opción a.
    ¡¡Saludos!!

  2. Diu la A. ¡Ay! Hay que ver lo duro que es el estar desocupado :-P. A ver si esta historia acaba mejor que las conferencias del Bolirrosa ése (mira, qué buen nombre para que lo incluyas en algún próximo relato). Mucha suerte en esta nueva singladura, herrspock. Por cierto, yo también he contestado sin necesidad de presiones del autor :-D. Un abrazo a todos.

  3. Yo elijo la a). Porque si en el Universo sólo hay 4 seres y en el capítulo 1 se matan entre sí, quedarían pocos grados de libertad para escribir una historia.

  4. Que conste que Larsis me ha dicho que él no presionó a nadie para poner ningún comentario, y que en todo caso está siguiendo una sutil campaña de marketing.

    En fin, que va ganado la opción a) por unanimidad. (3-0-0).

  5. Cómo que la a????? La C. Sangreeeeeeeeeeee.

  6. Mi elección es la C, y aunque no pretendo con ello influir en el autor.. (ya que supongo que elegir una de las opciones no creo que dé derecho a marcar cómo debe seguir la historia a partir de ahí), mi motivación es que de esa forma la participación en el Bien de los otros dos entes sea mayor y así conseguir mayor incertidumbre futura en la historia. Vamos… como cuando Goku y Vegeta se fusionaban o cuando célula absorbía a los androides

  7. Mmm… pues yo elijo la b, que está bastante abierta, ya que nadie dice que como resultado de la lucha vayan o no a morir los personajes y destruir una galaxia a mí me suena bien, al menos entretenido!

  8. Opción c. Es muy pronto para un enfrentamiento final. Además así añadimos el rollito venganza por el hermano muerto.

  9. por fin lo he leido con tranquilidad. esto empieza interesante. la idea de dejar un mensaje al próximo universo me recuerda al episodio causa y efecto de star trek tng (que no voy a destripar aquí) 😛

    bueno, yo elijo la A. esperamos más!!

  10. anda, que blog más listo que me pone el elefante rosa xD xD

  11. Bueno, bueno, con 8 votos ya, se destacan dos claras favoritas, la opción A (4 votos) y la C (3 votos), mientras que la B sólo tiene 1 voto por el momento. He estado hablando con Larsis y hemos pensado que el plazo de votación acabará cuando empiece a escribir la siguiente parte, que no será antes del viernes a las 24:00. Cuando eso suceda pondré aquí un comentario.

  12. Bueno, las interesantes me parecen (a) y (c): (a) permite una lucha de resistencia a largo plazo entre el bien y el mal, con miles de intrigas, y tal vez una lucha final de 3 a 1 en la que se decidirá el destino del próximo universo, (b) es poner el final cerca del principio, o al menos la pelea final, pero en realidad es sólo una lucha, no un enfrentamiento final, que podría ocurrir después. Sin embargo (b) sirve para mostrarnos los poderes de Ogoroth, que son mucho mayores que los de Rinat, Odara y Sairog por separado. (c) inicia una venganza y demás, pero tiene la desventaja de perder demasiado pronto a uno de los cuatro personajes, así que ya no me parece buena.

    Así que al final me quedo con la (b), justo la que no había tenido en cuenta al comienzo. Pero me parece lo mejor, una muestra de fuegos de artificio seguida probablemente por la desesperada huida de los tres dioses del bien del malvado Ogoroth.

  13. Elijo la opción b. Las razones que tengo han sido ya comentadas y son que con esta opción la historia queda más abierta puesto que no está condicionada a la muerte de ninguno de los personajes aunque esto puede ocurrir; además tengo curiosidad de ver como devastan la galaxia. También me gustaría que en los siguientes relatos se explicase la concepción del Mal que se tiene en la historia, porque está fuera de toda idea del mal que conocemos (ni Dark Weider es tan malo, jejeje).
    Bien espero que esto haga un poca más difícil la elección de la opción. Agur.

  14. Bueno, que muera uno desde el principio no es tan dramático… bien mirado podría ser como en un capítulo de CSI en el que alguien palma siempre nada más empezar y luego no se le echa tan de menos.
    Punto débil del razonamineto, eso sí, es que aquí estarían claras las causas de la muerte y el autor.
    El comentario de Becario-E respecto a los fuegos de artificio desde el comienzo de la historia recuerda bastante a cuando en V de Vendetta revienta el Old Beily (o como se escriba) nada más empezar… eso lleva a pensar que muy probablemente V acabe cumpliendo su venganza final (y hasta aquí puedo leer, al igual que de Cronopio no destriparé nada más)

  15. Por supuesto la c) es la que ahora mismo, tan al comienzo de la historia deberia ser. El mal en un principio debe ser muy fuerte como en toda historia de ciencia ficcion que se precie … luego, ya se verá si los buenos están a la altura.

  16. ¡Señoras y señores!, todavía no hay una clara vencedora, y tenemos un empate por el primer puesto:

    A – 4 votos
    B – 3 votos
    C – 4 votos

    En fin, si el resultado permaneciera como está, habría que hacer una mezcla de las opciones A y C, lo malo es que son incompatibles…, o no, me dice von Laris.

  17. Bueno, pues cerramos las urnas, y ¡tachán tachán!, tenemos un empate señoras y caballeros, entre la opción A (escapan los tres) y la C (muere Rinat). Los lectores, por tanto, que son un pueblo sabio, han decidido que quieren que la historia siga los caminos marcados por estas dos opciones simultáneamente.

    En definitiva, fin de la votación. Ganadoras: A y C.

    Próximo capítulo: el martes.


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